El Paris Saint-Germain llega a esta etapa del Mundial de Clubes atravesando un momento de máxima confianza y solidez futbolística. En sus últimos cinco encuentros oficiales, el equipo parisino acumula cuatro victorias y un empate, destacándose por la contundente goleada 4-0 sobre Inter Miami en octavos de final y, especialmente, por la conquista de la Champions League tras un aplastante 5-0 frente al Inter de Milán. Durante la fase de grupos, el PSG se impuso con autoridad ante Botafogo, Seattle Sounders y Atlético de Madrid, liderando el Grupo B gracias a un equilibrio notable entre su fortaleza defensiva y su poder ofensivo, lo que lo posiciona como uno de los principales favoritos al título.
El Bayern de Múnich se presenta en los cuartos de final del Mundial de Clubes tras una victoria convincente por 4-2 sobre Flamengo en octavos, ratificando su potencial ofensivo, pero también dejando expuesta cierta fragilidad en defensa. El equipo bávaro ha mostrado un rendimiento sólido en sus últimos cinco partidos, con tres triunfos, un empate y una derrota, y un promedio goleador elevado. Durante la fase de grupos, lideró el Grupo C con autoridad, destacando una aplastante goleada 10-0 sobre Auckland City, una victoria ajustada ante Boca Juniors y un empate ante Benfica. Esta combinación de poder ofensivo y momentos de desconcentración defensiva hacen del Bayern un rival temible, pero con aspectos por corregir en instancias clave.